
El ayawaska no es placer fugitivo,
ventura o aventura sin semilla como para los wiracochas
El ayawaska es una puerta, si,
Pero no para huir, sino para entrar
En estas y en otras naturalezas;
Para recorrer las provincias de la noche
Que no tienen distancia, inabarcables
La luz del ayahuasca, no explica, no revela misterios,
El ayahuasca riega la tierra desconocida
Y esa es su manera de alumbrar.
Y cuando se le llama con urgencia y con respeto ,
el ayawaska es el costado de un cuchillo de piedra
separa el cuerpo de su anima
si un anima esta enferma la divorcia de su materia dura
niega el contagio, lo empala
el ayawaska enseña el origen y la ubicación del mal
y dice con que cantos, con que ícaros espantarlos
Y si el cuerpo esta enfermo, igual
Lo separa de su anima para que no la pudra
Enseña también las raíces que mantienen al cuerpo espiritual del anima material
Distantes ... separados , hasta que la carne resucite en el preciso corazón de su salud
Y eso que parece ser nada lo es todo
Hay dones, hay poderes, hay mandatos, hay raíces, y jugos de raíces
Cortezas precisas para esto y aquello
Ciertos tipos de lluvias que se beben y también ciertas piedras
Como y cuando utilizarlos y prepararlos eso es lo que sabe el ayawaska
eso lo transfiere si así lo considera
Si el cuerpo y el anima lo merecen
Cuando se sabe llamar al ayawaska no hay error, no hay milagro, ni antes ni después
del ayawaska.
Hay lo que merecemos conocer, lo que merecemos ignorar, todo es merecimiento,
Cuando se sabe llamar al ayawaska es fácil todo imposible;
Porque hasta la ceniza se vuelve agua cuando un sediento la besa.
Aywaska Viaje de Curación
Tito La Rosa
Su vida:
"Tito La Rosa nace en Carhuaz, en la sierra peruana. A los 12 años se muda junto con su familia a Lima en donde termina sus estudios escolares e ingresa a la Universidad para estudiar Sociología. Paralelamente se convierte en sikuri, tocador de zampoñas. Se introdujo por esos años al mundo de la música andina tradicional, aprendiendo de los grandes maestros del huayno. Fue alumno de Jaime Guardia en charango, Alfredo Curaci en zampoña y Manuel Ríos en quena.
Al término de sus estudios superiores ingresa a trabajar al Instituto Nacional de Cultura - INC. Luego, en el año 1995, fue convocado por el Museo de Antropología para realizar un estudio sobre la música en el antiguo Perú".
La curación :
"En ese camino, su trabajo creativo como músico va íntimamente ligado a la investigación sobre el poder curativo de los sonidos ancestrales, abriendo de esta manera una nueva veta de investigación en la terapia a través del sonido. Ha dado a conocer sus investigaciones sobre el Poder Curativo de los Sonidos de los Instrumentos pre-colombinos en el CIIS California Institute of Integral Studies – School of Consciousness & Tansformation en San Francisco (USA), en el Institute of Noetic Sciences de Petaluma California, en el Open Center de Nueva York, en el departamento de Música de la Universidad de Puerto Rico y en la Universidad de Naropa en Boulder Colorado.
Trabaja con plantas sagradas".
Esta información la obtuve de su página web: http://www.titolarosa.com/